En un mágico rincón de Cantabria, al pie de los acantilados y junto a una ermita del siglo XIX, se encuentra este restaurante que lleva una década siendo fiel a su honesta y seductora propuesta culinaria.
En un mágico rincón de Cantabria, al pie de los acantilados y junto a una ermita del siglo XIX, se encuentra este restaurante que lleva una década siendo fiel a su honesta y seductora propuesta culinaria.