El pequeño gran proyecto gastronómico del incombustible Francisco José Abajo Abril aterriza en la capital.
El panorama gastronómico actual no deja de sorprendernos con interesantes aperturas que aportan a la cocina un nuevo significado. Nuevos proyectos. Recientes aperturas. Retos que sus artífices afrontan con una pasión desmedida buscando seducir a los paladares más sibaritas.
El restaurante FIJO abría sus puertas el pasado mes de noviembre de 2021 con un novedoso concepto que se plasma en pequeños miniplatos con una gran esencia. Elaboraciones que han sido el resultado de innumerables pruebas para conseguir el resultado perfecto en constante búsqueda de la excelencia.
Al frente de FIJO nos encontramos con Francisco José Abajo Abril, (José para los amigos) quien decidió dar un cambio de rumbo a su vida profesional dejando atrás su brillante carrera como procurador para dedicarse de lleno a montar su propio restaurante.
Tras fichar al cocinero peruano Fidel Meza López, juntos comenzaron a visitar un sinfin de locales para seleccionar aquellos platos que querían que formasen parte de la carta de FIJO. Pequeños bocados de placer, ideales para compartir alrededor de una mesa en un ambiente acogedor y distendido.
FIJO, un pequeño y coqueto restaurante que hace gala de una cuidada decoración obra del renombrado interiorista Jaime Sesé. Un espacio intimo y acogedor, donde la carta líquida cobra un protagonismo indiscutible para potenciar los aromas, sabores y matices: de los riquísimos platillos que conforman su apetecible carta, donde se combina la cocina española, la peruana y la internacional.
Una cocina honesta, sincera y con alma
Elaboraciones tradicionales con su toque personal, confieren a FIJO una rotunda personalidad. Calidad a precios razonables. Una fórmula acertada que funciona y se agradece en los tiempos que corren.
En la carta de FIJO encontramos una propuesta clásica con toques innovadores y sabores del mundo. Destacan, entre otras cosas, sus fabulosas Croquetas de Trufa, el Guacamole Alegre con Gambas Cristal, Gambones envueltos en kataifi, la original Hamburguesita de Ciervo, el Brioche de Atún y Foie o el Parmentier trufado con huevo a baja temperatura y foie.
Platillos que sirven en pequeños formatos para que podamos probar muchas cosas en una sola visita. Una carta dinámica y en constante evolución para que, cada vez que les visitemos, podamos saborear nuevas elaboraciones que nunca defraudan. Atentos a las sugerencias de cada mes.
Vivimos una propuesta gastronómica con alma. Una carta rotunda y con personalidad. Platillos que enamoran el paladar, tentándonos a volver mucho antes de lo que teníamos previsto. En su cuidada vinoteca encontramos referencias clásicas junto con una amplia oferta de vinos curiosos que podemos pedir, tanto por copas como por botellas e, incluso, adquirirlos para llevar a casa a un precio muy competitivo.
Además de la apetecible carta de FIJO, desde cocina nos ofrecen dos seductores menús degustación: Menú Breve y Menú Goloso. Pues hay más. Ahora, de cara al verano, FIJO nos invita a conocer su terraza, donde podremos saborear una cuidada selección de apetecibles aperitivos en horario de 12:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00.