El Viaje Gastronómico Gallego que Trasciende Generaciones

En el barrio madrileño de La Guindalera, una de las zonas más arquitectónicamente eclécticas de la capital donde las calles están impregnadas de historias y aspiraciones, emerge un templo culinario que captura la esencia de los verdes paisajes gallegos: Los Montes de Galicia.

Este restaurante, con una trayectoria de 27 años, trasciende la definición de un establecimiento para convertirse en el legado vivo de José Espasandín, un visionario que partió de su aldea en Galicia hacia la promesa de una vida mejor en la capital.

La odisea de José es un testimonio de resiliencia y perseverancia. Desde sus inicios como friegaplatos, José ha sido testigo de la transformación de la hostelería, un sector que antaño valoraba la paciencia y el aprendizaje continuo.

Estandarte de la alta cocina gallega

En la actualidad, Los Montes de Galicia se ha erigido como un estandarte de la alta cocina gallega, donde cada plato es una celebración de la tradición y la innovación, meticulosamente perfeccionada por José y su equipo. Un equipo sólido, profesional, consolidado en los primeros inicios del restaurante.

En una época que tiende a menospreciar la experiencia, Los Montes de Galicia se destaca como un bastión de la excelencia culinaria, donde la maestría se cimenta en la constancia y el esfuerzo diario. La inspiradora trayectoria de José Espasandín es un claro ejemplo de que los sueños se materializan con pasión y dedicación, conquistando paladares y corazones, uno a uno.

Ubicado en el número 46 de la calle Azcona (Madrid), Los Montes de Galicia es el epicentro de una historia rica de herencia y tradición. Después de una reforma ambiciosa, José decidió forjar su propio camino, creando un oasis de Galicia en Madrid. El escenario es más que un negocio, es un homenaje a la tierra que José añora, un refugio de nostalgia y frescura marítima en una metrópoli que le ha brindado tanto.

El restaurante rinde tributo a los emigrantes gallegos, cuyas historias se reflejan en cada elemento. La carta es un relato de la familia Espasandín, una saga de trabajo duro y valores transmitidos de generación en generación. En la actualidad, la segunda generación ha tomado las riendas con Daniel Espasandín al frente como director de sala del restaurante.

Santuario de calidad

Con una oferta tradicional de alto valor culinario y guiños vanguardistas, Los Montes de Galicia se distingue por platos más innovadores como el Tiradito de Corvina con Salsa de Cítricos y Huevas de Pez Volador, que encapsulan la diversidad de España y América. La vajilla y los azulejos son de la consagrada casa Sargadelos. No faltan excelsos mariscos, Almejas a la Marinera o Chipirones Encebollados en esencia de Albariño.

Platos emblemáticos bien conjugados como el Pulpo a Feira, el Besugo a la Plancha con Salsa Bilbaína, la Lubina Salvaje, el Cabrito Asado a Baja Temperatura, el Jarrete Asado a baja temperatura o el Caldo Gallego que hacia la abuela.

Postres tradicionales como la Filloa Rellena con Mousse de Queso, su aclamada Tarta de Queso Gallego con Confitura Casera de Mango. Y en coctelería de autor, con su sugerente Galician Martini a la cabeza. Todo ello sumado a una excelsa bodega, repleta de interesantes vinos nacionales e internacionales de gran prestigio y valor.

Es un santuario donde la calidad justifica el precio y donde cada visitante se convierte en parte de una historia que sigue escribiéndose con cada plato servido. El restaurante se mantiene abierto todos los días del año -inclusive en verano- y ofrece una carta muy versátil, adaptada a cada estación y sujeta a la oferta -y disponibilidad- del mercado.

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