El nuevo y sofisticado restaurante de Hannelore Kessker en Barcelona nos trae un vegan-chic con recetas exquisitas, entorno elegante y conciencia ‘eco’.

Situado en la esquina de Valencia con Enrique Granados Chez Kessler es una bombonera de local que se ha propuesto redefinir la imagen que tienen algunos restaurantes veganos en la ciudad. Con la mejor cocina de este estilo en Barcelona, con un entorno y un servicio cuidado y elegante, lleva al límite su simpático slogan:  Be Vegan, Be Chic.

Allí se puede disfrutar de desayunos sanos, deliciosas tapas, cócteles imaginativos, afterworks animados, cenas gourmet o de su nuevo y ambicioso brunch que quiere ser referencia en el barrio.

Un brunch con productos saludables en forma de bagels, pankakes, torradas, bocadillos o exóticos bowls. Todo en una gran terraza rodeada de plantas o en su coqueto salón interior. Y es que todo lo que respira este atractivo y pequeño local, abierto en plena pandemia, bascula entre la sofisticación, el buen ambiente y la conciencia contemporánea sobre alimentación sana, respeto al planeta y a los animales.

Sin duda, un reflejo de la personalidad de su propietaria y ‘alma mater’, Hannelore Kessler, mujer de grandes retos que desde su pequeña trinchera quiere poner su granito para cambiar las cosas:  “Nuestra meta no es crear un restaurante de éxito, nosotros vamos a cambiar el mundo. El gastronómico en especial, y el planeta en general. Hay que soñar a lo lo grande”.  Tras varios meses abiertos, han descubierto que su público se reparte al 50% en veganos y no veganos, la mayoría sin saberlo y casi todos repiten. “Algunos hasta han vuelto diciendo que se han vuelto vegetarianos”, presume la empresaria.

Give Peas a Chance

‘Give peas a chance’ (Dale una oportunidad a los guisantes!) , ‘Pasen y Vegan’, ‘No es take away, es Pret a Porter’, ‘Tapas que no tapan maltrato animal’… son solo algunos de las divertidas proclamas que usan en sus redes para atraer y a la vez despertar conciencias de forma empática, sin obligar a nadie a comulgar con ellos. Pero cuando cocinan se ponen muy serios y preparan los mejores platos gourmet usando verduras y legumbres de proximidad con mucho arte.

En la carta se pueden  encontrar los últimos productos del mercado vegano: “gambas”, “salmón ahumado”, “atún” y también deliciosas recetas propias como el shiitake al Pedro Ximenez, los tacos con legumbreta y menta, los gnocchis al queso azul con pera caramelizada o el arroz al “marisco”. También le dan la vuelta a tapas clásicas con sus bravas de patatas baby, de receta secreta, las de boniatos con mayonesa de trufa o su famosa tortilla de patata, calabacín y cebolla caramelizada que obliga a repetir. Los dulces son caseros y de un nivel de pastelería muy alto y  siempre con productos de temporada.

Todo es vegano, igual que las bebidas. La gran mayoría de sus proveedores son empresas pequeñas y familiares. Compran productos de proximidad y ecológicos, y la fruta y verdura les llegan cada día. Ponen mucho esmero en que todo esté fresco. Además usan siempre que `pueden productos reciclados minimizando su huella de carbono en el planeta.

“Queremos crear un entorno chic donde la elegancia y la sofisticación se combinen con platos exquisitos y vajillas lujosas. Donde puedes desayunar tu bowl de açaí preferido, tu bocadillo de tortilla, un vermut con cava con los amigos un sábado, un after hours con los colegas al salir de trabajar, un menú saludable digno de un deportista o una cena romántica. Todo con la marca de nuestros mejores cocineros”. Hanne Kessler.