Uno de los mayores placeres de la vida, y también uno de los más sencillos, es un plato de queso, un pedazo de pan y un vaso de vino. Y si ya el más humilde trozo de queso de cabra puede ser un manjar de dioses, es muy estimulante saber que hay muchísimas más variedades por descubrir.
Con el título Todo sobre el queso queda clarísimo lo que nos vamos a encontrar: un montón de recetas, consejos y trucos para sacarle el mayor partido posible a un producto que cada vez tiene más adeptos.
Fiona Beckett, su premiada autora, le guiará a través de los tipos, los usos y la versatilidad del queso con su característica pasión por la buena comida y el vino. Y no puede haber mejor momento que ahora, con la llegada de una generación de fabricantes de queso artesanales nueva y con talento.
Aunque es un libro que lleva unos años en las librerías, no deja de llamarnos la atención. Está dividido en cinco capítulos que nos llevan desde una introducción al mundo del queso y los distintos tipos que hay de ellos, pasando por distintas recomendaciones sobre qué beber con cada uno de ellos, el modo de presentar una buena tabla de quesos y, por último, un total de cuarenta y cinco recetas con el queso como ingrediente principal.
El objetivo principal de este libro, escrito por Fiona Becket, es introducir al lector en el sabroso mundo del queso, descubrir los distintos tipos que existen (muchos les serán desconocidos) y ayudarle a disfrutar más de ellos.
Descubriremos cómo se elabora el queso y por qué varía tanto; cómo se crea una tabla de quesos clásica, otra moderna, sofisticada e inesperada; cómo invitar con queso (¡reinvente las fiestas de vino y queso!) tomando ideas de todo el mundo; cómo introducirlo en una cena romántica para dos o convertirlo en el centro de una barbacoa o un brunch.
Fiona nos describe algunas características curiosas sobre su consumo: “Excepto en los quesos muy madurados, la corteza es comestible, y añade un sabor de frutos secos a cada bocado”.
Quizá le sorprenda descubrir que el champagne puede ser un excelente maridaje con el queso. También funciona bien con un queso con ligero sabor a cal, como un chaource (una combinación clásica), un queso de cabra joven de delicado sabor o un queso double-crème o triple crème.
La diferencia entre un plato de queso y una tabla de quesos no está en la superficie sobre la que se presenta, sino en el hecho de que se sirven a cada comensal raciones de queso individuales en lugar de poner el queso en el centro de la mesa para compartirlo. En opinión de Fiona, es el modo mejor de presentar el plato de quesos, particularmente en mitad de una cena. No hay por qué comprar mucho queso. Se puede crear un equilibrio perfecto de ingredientes, conjugar mejor con el vino u otras bebidas.
En este libro se pueden disfrutar de 44 recetas hechas con queso. Una de las más vistosas es la creación de las clásicas verrines. Las verrines hacen furor en Francia -pequeños entrantes o postres con estilo dispuestos en capas en un vaso-. En el libro disponemos de dos variantes sobre el tema, que tienen como base dos ingredientes que se complementan como el pepino y el queso fresco. Las dos verrines serán perfectas en una cena de verano o en un bufé para una fiesta. Servir un Riesling seco o un Grüner Veltliner austríaco con ambas sería el detalle perfecto de su velada.
Esperemos que os guste esta apetitosa sugerencia llena de gusto e imaginación. El libro lo podéis encontrar en cualquier librería especializada o bien en La Casa del Libro.