Andorra Taste, el Encuentro Internacional de Gastronomía de Alta Montaña, ha cerrado su tercera edición con la clausura de la feria popular.
Después de una jornadas profesionales en las que los cocineros andorranos han compartido experiencias con chefs venidos de otras montañas y también de otras latitudes (como los de los países nórdicos que han sido los invitados estrella de este año), Andorra Taste ha tenido su final de fiesta con la feria popular destinada a acercar la cocina del país tanto a residentes como visitantes.
A pesar de la presencia de la lluvia durante todo el fin de semana, la asistencia de público no se ha echado de menos en Andorra Taste Popular. Ya sea aprovechando los momentos sin precipitación o resguardados en las carpas que la organización ha instalado a lo largo del recinto del Prat del Roure (Escaldes-Engordany), andorranos y turistas han podido disfrutar de una amplia oferta gastronómica. En palabras de Betim Budzaku, director general de Andorra Turisme, “se ha notado que la gente tiene ganas de vivir el evento”. Prueba de ello han sido las más de 35.000 degustaciones vendidas durante estos tres días, contando las tapas y platillos ideados para la ocasión por parte de los restauradores andorranos participantes en el evento, así como la amplia selección de vinos, cavas, cervezas y refrescos ofrecida.
Una fiesta popular
Unas cifras que ratifican el buen momento de la gastronomía andorrana y consolidan una feria en la que no sólo es protagonista la cocina sino también una extensa oferta lúdica. Cabe tener en cuenta que Andorra Taste Popular ha realizado también diversos talleres de cocina para niños y varios showcookings con cocina en directo y catas de vinos y cervezas. Sin olvidarnos tampoco de las actuaciones musicales en directo de grupos musicales en los ratos en los que la meteorología ha dado una tregua.
La espectacular respuesta de público, que no se ha dejado intimidar por el mal tiempo y que incluso ha hecho que en momentos determinados algunos restaurantes se quedasen sin stock, hace difícil señalar la tapa más vendida. De todas maneras, podemos destacar que entre las tapas que más éxito han cosechado durante los tres días de fiesta gastronómica figuran (por orden alfabético) el canelón de carrillera de ternera con bechamel de foie y setas de temporada, del restaurante de Andorra la Vella El Celler d’en Toni (Andorra la Vella); la pizza de picaña de vaca con queso Bauma, macadamia y aceite ahumado, del Hincha (Escaldes-Engordany) de Nandu Jubany, y el bikini pato Pekín, de Kao (Soldeu).
Andorra Taste
A éstas les siguen de cerca el resto de propuestas de los participantes de esta tercera edición de Andorra Taste: Beç (Escaldes-Engordany), Blu Restobar Caldea (Escaldes- Engordany), Can Manel (Andorra la Vella), Casino Unnic (Andorra la Vella), Émo (Erts), L’Isard (Andorra la Vella), Jou la Borda (Sispony), Kökosnøt (Andorra la Vella), Mínim’s (Andorra la Vella), Mood Sensorial (Escaldes-Engordany), Odetti Bistro (Escaldes-Engordany), Plató (Andorra la Vella), Sol i Neu (Soldeu) y Sottovoce (Andorra la Vella). A estos hay que sumarles también la tienda gourmet Ana Cerezo Pernilea! (Andorra la Vella) y les pastelerías Sauleda (Andorra la Vella) y Youcake by Estopiñán (Escaldes-Engordany). También se podía encontrar un estand con productos agrícolas y artesanos del país.
En reconocimiento al esfuerzo de todos los participantes, Benjamín Lana, director general de Vocento Gastronomía, afirmaba que “en esta tercera edición de Andorra Taste ha germinado ya la semilla que plantamos hace tres años y ha sido un esfuerzo de muchos, pero sobre todo de los cocineros andorranos que han creído en este proyecto».
Cocina de alta montaña
Andora Taste Popular ha puesto el punto y final a un encuentro dual, con una parte abierta a todo el público pero también con una de profesional. Unas jornadas estas últimas que han tenido un gran seguimiento, con un millar de inscritos -presenciales y en línea- que han seguido las ponencias propuestas desde una treintena de países.
Este año se ha contado con la presencia de grandes nombres de la cocina internacional como, entre otros, los chefs nórdicos Filip Gemzell, Søren Selin, Christopher Haatuft, el francés Frédéric Molina, o españoles como Elena Arzak o David Yárnoz, así como de quien fue el fundador del movimiento de la Cocina Nórdica, Claus Meyer y la chef catalana Carme Ruscalleda, en quien ha recaído el Andorra Taste Award de este 2024. Todos ellos, además, firmantes del Manifiesto de Andorra, un documento nacido en la primera edición con la voluntad de impulsar los territorios de montaña y su patrimonio culinario y que ya congrega a 155 productores y chefs unidos en este objetivo común.
Andorra Taste cierra así una tercera edición en la que se ha demostrado el compromiso integral que la cocina de montaña tiene con el territorio y su voluntad de trabajarlo sosteniblemente.