Chispa Bistró (Madrid), el restaurante del joven chef Juan D’Onofrio, recibió de nuevo su placa de Restaurante Recomendado de la Guía Michelin, posicionándose como el chef más joven al frente de un establecimiento con esta distinción.
La categoría ‘Recomendados’ de Guía Michelin distingue aquellos restaurantes que, por su nivel de cocina, el trato de los productos, el trabajo en sala o los esfuerzos del chef y su equipo de cocina, merecen ser incluidos en su selección. En marzo de 2023, el restaurante del chef argentino Juan D’Onofrio, entró a formar parte de esta selección de 783 restaurantes.
Anoche se entregaron en el recinto ferial de IFEMA, las correspondientes placas distintivas a todos los chefs, entre ellos a Juan D’Onofrio, quien a tus 26 años es el chef más joven en recibir esta distinción.
La ‘chispa’ argentina
Juan D’Onofrio nació en Buenos Aires hace 26 años. En 2017 decidió comenzar a estudiar cocina en la Escuela Lycée (Buenos Aires) tras unos meses en el grado de Publicidad. Un año después, decide mudarse a Barcelona para continuar su formación en España, en la escuela de gastronomía y pastelería Bellart. Tras finalizar sus estudios, trabajó junto al chef Álvaro Garrido, en Mina* (Bilbao) y también en Santceloni** (Madrid).
Durante la pandemia volvió a su país natal donde comenzó a trabajar junto al chef Dante Liporace (ex ElBulli) en el restaurante Mercado de Liniers. Desde Argentina tras pasar por varias cocinas del mundo aterrizó en Madrid: la ciudad donde todos, incluso los cocineros, encuentran su sitio. Chispa Bistró cobró entonces vida. Su equipo de ocho personas transmite una misma filosofía: compartir con el cliente a través de la cocina y la sala.
La cocina de Chispa, gira en torno a 3 ejes: el producto como gran protagonista, la temporalidad el faro de la propuesta, y la tradición como punto de partida. Con hilo conductor de estos tres: la brasa, presente de algún modo u otro en todos los platos que componen la propuesta. De este modo, abunda el uso de verduras y de pescados, dependiendo de lo que dicte el mercado, y destacan diferentes técnicas: desde curados, como el bonito, el pastrami o las gambas, la brasa en productos como la sandía o el cogollo, así como los fermentados, encurtidos y fondos muy trabajados.
Con una propuesta abierta que huye de un orden establecido, en Chispa proponen una experiencia flexible. La carta está compuesta por casi quince platos, y una selección de quesos y postres. El comensal es el que elige cómo quiere disfrutar en Chispa Bistró.