La segunda parte del proyecto ‘Jumilla: Diálogos de Arte y Vino’ se presentó el pasado miércoles 6 de marzo en los Teatros Luchana de Madrid con la proyección de la pieza documental de su segundo capítulo: ‘La Elaboración’.
El Consejo Regulador de la DOP Jumilla, representado por su presidente, Silvano García, y conducido por su secretaria, Carolina Martínez, presentó la segunda entrega de este proyecto pionero en el mundo del vino, donde la creatividad supone el punto de encuentro entre el vino y la gastronomía junto a diferentes disciplinas artísticas.
‘Jumilla: Diálogos de Arte y Vino’ narra las conversaciones entre profesionales acerca del proceso de elaboración de los vinos del territorio de la DOP Jumilla. En este capítulo, gastronomía y vino se unen al diseño y la joyería para culminar con la creación de cuatro joyas basadas en la elaboración y los movimientos del vino.
González-Conejero, embajador de la DOP Jumilla
En la presentación estuvieron presentes los protagonistas de la campaña: el chef embajador de la DOP Jumilla, Pablo González-Conejero (3 soles Repsol y 2 estrellas Michelin); la arquitecta y diseñadora Rosana Galián (GarraStudio); además de María Ritter, directora de la Guía Repsol; la comunicadora gastronómica Pilar Hernández Coloma, y representantes de las distintas bodegas.
Con la proyección de la campaña se quiso desvelar el secreto mejor guardado: la colección cápsula de joyería (diseñada en exclusiva por Rosana Galián y formada por cuatro piezas llamada Latido) que representan diferentes procesos de la elaboración del vino: unos pendientes basados en el despalillado, una gargantilla que representa el estrujado, un medallón donde se ha vectorizado las texturas de la fermentación y unos pendientes ear cuff basados en los movimientos durante el proceso del trasiego.
Un ser vivo que se convierte en magia
“La forma de presentar la colección era todo un reto para nosotros. Rosana y yo pensamos que la mejor expresión de resumir este proceso creativo y relacionarlo con la elaboración del vino era mediante una performance donde nosotros mismos representáramos, de forma metafórica, el momento de estrujado de la uva, que puede resultar violenta entre comillas, pero es un gesto con mucho amor, sumado a los colores de las uvas, esas texturas…”, explicó Pablo González-Conejero, chef embajador de la DOP Jumilla.
“Lo bonito de este proyecto ha sido mirar atrás y darte cuenta de este camino que hemos recorrido junto a Pablo y el resto del equipo. Empezamos con la curiosidad de aprender todo sobre el proceso del vino, ser vivo fruto del viñedo. Pero este vino se convierte en algo más, en magia, con el aporte de las personas y profesionales de las bodegas de Jumilla, para darnos cuenta de que, al final, la verdadera joya es el propio vino que bebemos en cada copa”, añadió Rosana Galián.
María Ritter, directora de la Guía Repsol, quiso estar presente en el evento y apoyar esta iniciativa describiéndola como “una forma de aportar cultura a nuestro país, alineando el arte y el diseño con el mundo del vino, para añadir riqueza gastronómica singular, y desde la verdad”.
La presentación se completó con un showroom de vinos en el que participaron trece bodegas de la DOP Jumilla presentando sus mejores referencias a profesionales del mundo del vino y de la gastronomía.